EL VIAJE FUE PARA MI UN RESBALÓN HACIA DENTRO. Safrika.
De pronto es, como si me quedara sin sonidos, sólo la cigarra y lo demás
un silencio denso y matemático, un silencio verde de moscas y bocanadas.
Todo lo que recuerdo, después de la enésima calada a un cigarrillo que
no debiera fumar, eres tú y tus ojos llorando en Jaipur
con cuarenta
de fiebre.
El agua en la piscina está
demasiado fría ya en septiembre para alguien como yo,
bostezo y lanzo el cigarrillo contra el césped por cortar,
y todo lo que recuerdo
eres tú caminando por delante de mi,
abriéndote camino entre animales y fosas,
desollándote en el ensordecedor tráfico de Delhi,
salvándome de cien mil atropellos, todo
lo que recuerdo eres tú
y a los niños enfermos, con legañas de colores,
y las estaciones de tren
donde el estómago se daba la vuelta y los urinarios públicos cargados contra
nosotros, al pasar con una aspiración, y es así, lo único,
lo más hermoso, de todo lo que recuerdo, eres tú.
Ahora estoy en el campo, mi padre duerme cerca, un sueño de barrigas y
sobresaltos. No entiende que no quiera
hablar de ello pero es que
quiero olvidarme del viaje.
Claro que, no puedo.
Y no hago más que dar vueltas y más
vueltas y
en la piscina, meto un pie y está helada, helada para gente como yo que
se resfría poco pero cuando lo hace está perdida, que soy fuerte como un roble pero a veces
me vengo abajo y parece demasiado aventurarse y mojarse el pelo
un uno de septiembre, sin saber si mañana
me sentiré mejor, se pasará el mal de estómago, sobreviviré a
mi corazón que pesa con estos mil años de existencia,
sin saber si volverás, si volverás queriendo, y con los perros que ladran y
un gallo cantando a deshora y viendo estas estelas de aviones en el cielo azul con el silencio
tan grande que no deja paso a nada más que no sean mis propios pensamientos
cargados de pieles y barro.
Perdona el mal poema, todo se atropella
y hace tanto
que no escribo...
El traje reparado de la chica astronauta.
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poemas nuestros,
Safrika
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4 comentarios:
triste sensación
estupendo poema
aupa Saf
v
A veces los viajes se convierten en huecos, el tiempo quizá los llene de contenido.
Yo diría más bien que uno tiene un hueco pero luego se da cuenta de que necesita hacer más espacio para meter todo eso. Y vienes desbordado y tienes que ir filtrando y filtrando. En fin, lo que sí que es cierto es que el tiempo va haciendo lo suyo.
Eso quería decir, más o menos, es que... hace tanto que no escribo... (je, muas!)
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