un poema de sofía castañón


LO ALTOS QUE FUIMOS EN EL UMBRAL
DE LA PUERTA

Las marcas que Papá hizo con exactitud delineante
parecen ahora el elogio a lo mínimo.
Incluso aquellas
que ilustran nuestra altura real.
Tan pequeños no se puede sentir miedo
a los gigantes. Algo tan grande
nunca te acierta a dar.

Sofía Castañón (La sombra de Peter Pan, Ediciones del 4 de Agosto)

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Buena Pama, buena niña de papa y mama.