Objetos perdidos, un poema de María Monjas


Un zapato abandonado
en mitad de la acera
es como una flor arrancada
de pétalos blancos pisoteados.

Si es de mujer
huele a soledad de prostituta
a madre extenuada de vivir
a jovencita con el corazón nuevo roto

Si es de hombre
dibuja las arrugas del anciano viejo
del obrero muerto de frío e injusticia
del mendigo loco de naufragios

Un zapato abandonado
en mitad de la acera
es como una semilla arrancada
del jardín de la esperanza

Nelly Sachs


En Supervivientes de Eclipse estelar (1949)




ADIÓS-

palabra sangrante de dos heridas.
Ayer aún palabra del mar
con el barco que se hunde
como espada en el centro -
Ayer aún palabra atravesada
por el morir de estrellas fugaces -
garganta de los ruiseñores
besada a medianoche-
Hoy - dos harapos colgantes
y pelo humano en una mano, garra
que arranca -
Y nosotros que sangramos después -
desangrándonos junto a ti -
mantenemos tu manantial en nuestras manos.
Nosotros tropas de los que se despiden
que tu oscuridad fabrican -
hasta que la muerte dice: calla -
pero aquí vale: ¡seguir sangrando!

Yolanda Sáenz de Tejada one more time



Yo me crié entre
chicos.
Hombresniños
de vello naciente
en la voz.
Y jugué a indios y
vaqueros
(en lugar de ligarme
al novio de la
Nancy).
Aprendí a conducir
con mi primera
menstruación.
-Aquel R6 atravesaba
(sin freno)
el mar de olivos
en las ardientes tardes
de verano-.
Mi piel huele aún
a aceituna
caliente
y al beso de aquel
chico moreno
que se me escurrió
(años más tarde)
de la vida.
Yo me crié entre
chicos y
robé con ellos
en las casas
abandonadas de mi pueblo;
escondí postales
de mujeres desnudas
que se tocaban
los pechos
y caminé sin miedo
por los tejados de
mi barrio.
Con mi gran parte
masculina,
adoro a las mujeres
que son así.
Y con la inmensa
femenina,
adoro a los
hombres
que aman a esas
mujeres.

sábado 28 / XI: estreno de PERVERSIONES Y TERNURAS / PERVERSIÓNS E TENRURAS de Vukušić

Viejas glorias, un relato de Sonia San Román



Nací
cuando la virgen de Fátima
se apareció a los pastorcitos.
Cuando en Rusia empezó el comunismo.
Cuando en Europa se acabó la guerra.
Nací poeta en esta vida perra.

Gloria Fuertes (Madrid, 28 de julio de 1917 - ídem, 27 de noviembre de 1998)


En 1917 un grupo de soldados alemanes sumergen un submarino en el mar del Norte provocando una sucesión de olas de cuatro metros que acabarán por hundir una pequeña embarcación de pescadores que se encontraba cerca de la costa.
Los tripulantes se salvan milagrosamente de la muerte pero vuelven a casa con signos evidentes de hipotermia.
Algunos sólo tienen el virus de la gripe. El pescador Bert Verstraeten lanza un estornudo que viaja primero por la alcoba en la que está acostado en una vieja casa herencia de su padre cercana a la Mark Plazt de Brujas y luego, por la plomiza atmósfera neerlandesa a una velocidad de 160 kilómetros por hora. Las bacterias molestas, pero prácticamente inofensivas para el señor Verstraeten, llegaron en cinco días y tres horas hasta la cama parisina del pintor Edgar Degas ocasionándole un estornudo y, dos meses más tarde, la muerte.
Justo encima de su tumba, en el cementerio de Montmartre de París, un gorrión picotea las semillas de las flores secas de unos ramos de margaritas. Levanta el vuelo a las doce en punto, asustado por las campanadas de algún reloj cercano que anunciaba el mediodía y se posa, exhausto, en el bordillo de una ventana abarrotada de la prisión de Saint-Lazare donde se entristecía sola una marchita Mata Hari.
Cuando vuelve a marcharse, el gorrión pierde una de sus plumas cerca de uno de los barrotes oxidados y los pensamientos de la bailarina viajan hasta Madrid, donde vistió por última vez su elegantísimo foulard de plumas de marabú mientras espiaba, para una Francia que la acusaba de traidora, al embajador de los alemanes. Cerraba los ojos y veía con todo lujo de detalles las suntuosidades del Hotel Palace, ajeno al mundo convulso donde agarraba sus cimientos. Cuando los abría, contemplaba la mugre que la rodeaba en la prisión, impropia de una cortesana de su altura, y recordaba a los sucios obreros madrileños, a punto de alzarse en huelga general, que la observaban lascivos y admirados, como quien observa un sueño sólo alcanzable para señoritos en el barrio de Lavapiés de la capital de España.
Allí mismo, en Lavapiés, en una humilde buhardilla de la calle de la Espada, el 28 de julio, una matrona robusta empapada en sudor con trazas de elefanta vieja, propinaba un azote más brusco de lo común en las nalgas de una recién nacida, para adiestrarla desde el principio en las crueldades de la vida. El azote, lejos de producir el efecto deseado, desencadenó una serie de prodigios contra natura aún inexplicables según los parámetros del empirismo científico y la pequeña lanzó una sonrisa desdentada y limpia con un ligero gorjeo.
La niña Gloria acababa de convertirse en poeta.

Deja que te cuente


PRESENTACIÓN EN MADRID DE LA ANTOLOGÍA DE RELATOS
MUJERES CUENTISTAS (Baile del sol)


con las letras y las cosas de
Inés Matute, Inma Luna, Ángeles
Jurado, Ana P. Cañamares, Roxana
Popelka, Marina Sanmartín, Carmen
Camacho
y Déborah Vukušić


26 de noviembre, a las ocho y media
en la librería "Tres rosas amarillas".
san vicente ferrer, 34.

Pasen y lean.


Autoras teatrales de la II República española

Con el objetivo de reivindicar la memoria de las autoras teatrales de la II República española, la Fundación Autor de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) ha organizado el ciclo de lecturas dramatizadas y debate en torno a Dramaturgas republicanas, que se celebrará del 23 al 25 de noviembre en la sala Manuel de Falla de la SGAE en Madrid (C/Fernando VI, 4 -Metro Alonso Martínez-) a las 19:30 (entrada libre hasta completar aforo).

La iniciativa, de la asociación DONESenART, compuesta por mujeres creadoras de la Comunidad Valenciana, a la que se suma el Ayuntamiento de Madrid y el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), servirá para intentar acercar al público actual algunas de sus más interesantes propuestas escénicas. “Las mujeres hemos sido siempre las grandes olvidadas de la historia. También en el terreno de la cultura y la creación. En la República, por ejemplo, hubo alrededor de medio centenar de dramaturgas, pero, por lo general, su trabajo ha pasado prácticamente desapercibido o, directamente, se ha ignorado”, explica Antonia Bueno, dramaturga y presidenta de la asociación DONESenART.




El programa de Dramaturgas republicanas incluye tres sesiones de lecturas dramatizadas dedicadas a las autoras María Teresa León, Mercé Rodoreda y María Martínez Sierra, cuyos textos serán dirigidos por Jesús Briones, Elena Cánovas y Paloma Pedrero, respectivamente, y una mesa debate el primer día del ciclo compuesta por Eduardo Pérez Rasilla, Laila Ripoll e Iride Lamartina Lens. Entre los más de veinte actores y actrices que intervendrán en este ciclo están Luis Hostalot, Antonio Canal, Gloria Muñoz, Blanca Rivera y Manuel Mata.


“Hemos querido seleccionar tres autoras con una concepción del teatro personal, con estilos diferentes y capaces de plasmar en sus obras su propia visión de la sociedad de la época. Representan tres sensibilidades diferentes, pero, a la vez, son tres mujeres luchadoras y comprometidas con su tiempo”, expone Bueno.


23 de noviembre, apertura con obra de María Teresa León y debate.
Dramaturgas republicanas se abre con la lectura dramatizada de la obra breve Huelga en el puerto, de María Teresa León, dirigida por Jesús Briones. A continuación se ha organizado la mesa redonda Mujeres dramaturgas en la República en la que participarán Eduardo Pérez Rasilla, profesor de literatura teatral en la Universidad Carlos III; Laila Ripoll, autora teatral (Los niños perdidos y Cancionero republicano) e Iride Lamartina Lens, hispanista y profesora de Pace University, de Nueva York.

Al día siguiente, el 24 de noviembre, será el turno de la lectura dramatizada de El maniquí, de Mercé Rodoreda, dirigida por Elena Cánovas. Finalmente, el ciclo concluye con Así es (tercer acto), de María Martínez Sierra, de Paloma Pedrero el 25 de noviembre. En este caso, Eduardo Pérez Rasilla hará una breve introducción de la autora y de la obra.
Acerca de ‘Dramaturgas republicanas’.

Este ciclo persigue recuperar la memoria sobre la obra de las mujeres dramaturgas republicanas, grandes olvidadas que, sin embargo, expresan una mirada a la realidad absolutamente imprescindible para un cabal conocimiento de la literatura y el teatro español del siglo XX. Ese es precisamente uno de los ejes de trabajo de la asociación DONESenART, compuesta por mujeres creadoras de la Comunidad Valenciana, que con su presidenta a la cabeza, la autora Antonia Bueno, crea el Ciclo de Dramaturgas Republicanas, realizado este año en el marco del IV Festival Octubre Dones en la sede de la SGAE de Valencia, origen del que ahora celebramos en Madrid.
Revisitar el pasado histórico -y más si es reciente y ha generado dolor- suele producir una cierta incomodidad, incluso vértigo, porque, en cierto modo, implica una nueva mirada a lo acontecido y, en no pocas ocasiones, juicios y conclusiones diferentes y encontradas sobre aquello. Walter Benjamin, filósofo y escritor de origen judío que, escapando de la persecución nazi en 1940, vino a morir en Port Bou, junto a la frontera española, defiende en su obra la responsabilidad de las generaciones presentes con respecto a las que nos precedieron. Y afirma que sin hacer justicia a quienes en la historia han ocupado el papel de víctimas no es posible el progreso.

Recordarle aquí nos ayuda a encontrar buenas razones para recuperar la memoria sobre lo ocurrido en el pasado en nuestro país en el campo de la literatura dramática escrita por mujeres. Porque, nuestro siglo XX, herido profundamente por la cesura de la Guerra generada por el levantamiento militar, conserva oculta una parte de la creación artística, la de las mujeres dramaturgas de época republicana, que permanecen casi desconocidas y apenas puestas en escena. A contribuir a saldar mínimamente esa deuda, y sobre todo, a fomentar el conocimiento de la dramaturgia femenina, se orienta este ciclo que, entre lecturas dramatizadas y debates, repasará algunos de los nombres claves de las dramaturgas republicanas.


Texto extraído de aquí

Yolanda Castaño, premio Ojo Crítico de poesía de RNE


La poetisa gallega Yolanda Castaño es, a sus 32 años, una de las autoras más reconocidas en la nueva poesía española contemporánea. Además, desde este jueves 19 de noviembre de 2009, es también la gandora del premio Ojo Crítico de Poesía.

Su última obra, el poemario 'Profundidad de campo', le ha valido el galardón. El jurado del Premio Ojo Crítico ha estado formado por Pablo García Casado, poeta y Premio Ojo Crítico de Poesía 2000; Joaquín Pérez Azaústre, escritor y poeta; Ariadna G. García, poeta; Ignacio Elguero, director del programa 'La Estación Azul' de RNE; Roberto Loya, periodista especializado en poesía de RNE; y los directores del programa 'El Ojo Crítico', Laura Barranchina y Julio Valverde.

Poetisa desde la infancia

A Yolanda Castaño sólo le hicieron falta siete años de su vida para empezar a imitar a los grandes autores de poesía y literatura de su tiempo. Con el paso de los años, se convirtió en la voz que suena con más fuerza en la nueva poesía gallega.

Sus letras están a la vanguardia, con líneas vitalistas que muestran un esplendor lleno de imaginación. Obras como 'Elevar as pálpebras' (1995) o 'Vivimos no ciclo das Frofanías' (1998), escritas en gallego, le han valido a Yolanda Castaño el reconocimiento de la crítica, al igual que su último poemario, con el que ha conseguido el Premio Ojo Crítico de Poesía que otorga RNE.

'Profundidad de campo' (Visor, 2009) es un libro que "plantea una propuesta moral con una estética de vanguardia". Según el jurado, la obra destaca por su "dimensión ética", ya que "aborda asuntos que enfrentan al lector a temas universales", como "la construcción de la identidad o el libre albedrio". También por la riqueza y "la coherencia orgánica" del poemario de la autora gallega.

La modalidad de Poesía es el quinto de los Premios Ojo Crítico que se fallan este año. Los galardonados en las categorías de Narrativa y Artes Plásticas, los dos últimos premios, se conocerán en los próximos días.

20 años de premios

Los Premios Ojo Crítico, que en esta edición cumplen 20 años, fueron creados por el programa cultural de Radio Nacional 'El Ojo Crítico'. Su objetivo es reconocer el trabajo de los jóvenes talentos y se han convertido en uno de los mejores apoyos para la difusión y promoción de artistas que comienzan sus carreras, dotando a sus obras de gran reconocimiento.

Además de los premios en las categorías de Música Moderna, Teatro, Música Clásica, Cine, Poesía, Narrativa y Artes Plásticas, el programa también homenajea toda una trayectoria profesional con el Premio Especial Ojo Crítico. En las últimas ediciones este premio ha recaído en Pedro Almodóvar (2008), Joaquín Sabina (2007), Pablo García Baena (2006) y Santiago Calatrava (2005).

'El Ojo Crítico' se emite en Radio Nacional, de lunes a viernes, de 19 a 20 horas


Noticia extraída de aquí

Sharon Olds


Paseando por el blog Neorrabioso nos hacemos eco de su recomendación acerca de la lectura de Sharon Olds.

Aquí va uno de sus poemas:

FOTOGRAFÍA DE LA NIÑA

La niña está sentada en la tierra dura,
áspero molde de Rusia, en la sequía
de 1921, aturdida,
los ojos cerrados, la boca abierta,
un crudo viento abrasador le sopla
arena en la cara. Hambruna y pubertad
se apoderan de ella. Echada sobre un saco,
el calor descoloca todo lo que lleva puesto,
curvado el tierno radio de su brazo.
No puede no ser bella, pero
se muere de hambre. Adelgaza cada día, y sus huesos
se hacen largos, porosos. El pie de foto dice
que va a morir de hambre ese invierno
con miles de otros seres. En la sima de su cuerpo
los ovarios liberan sus primeros óvulos,
dorados como el grano.

Olds, Sharon (EE.UU, 1942)LOS MUERTOS Y LOS VIVOS, Bartleby, Madrid, 2006, 124 págs. Traducción de Juan José Almagro Iglesias y Carlos Jiménez Arribas.

Texto extraído de aquí

23 Pandoras+1 Pandoro en el número 6 de la revista Groenlandia

Lo dicho:
en el número 6 de la Revista Groenlandia, entre muchas otras cosas interesantes, han incluido una estupenda reseña sobre nuestra antología en la página 19 y un relato de nuestro Pandoro Vicente Muñoz Álvarez, en la página 91, perteneciente a libro Los que vienen detrás y otros relatos.

¡GRACIAS!

Las Perversiones y ternuras de Deborah Vukusic



Guerra de identidad (Baile del sol, 2008), de Déborah Vukušić, fue uno de los poemarios revelación del año pasado y nos descubrió a una poeta de voz visceral y profunda, testimonial y versátil, capaz de provocar emociones muy diversas en el lector. Centrado en el Conflicto de los Balcanes, el poemario diseccionaba la infancia de la autora, haciendo especial hincapié en la figura paterna, a la que dedicaba algunos versos desgarradores. El libro fue recibido con estupendos comentarios por la crítica y completado, en una segunda edición aparecida hace unos meses, con un colofón titulado Cuaderno de batallas, que le confiere aún mayor unidad y sentido. Un poemario, en suma, que me atrevería a calificar de imprescindible para la poesía femenina española de estos últimos años.
Perversiones y ternuras (Perversións e tenruras), recién publicado en edición bilingüe por Baile del sol, nos presenta otra faceta y registro de esta autora gallego-croata (también actriz de oficio), que mediante un hábil ejercicio de heteronimia nos invita a un sugerente baile de máscaras: fetichismo, vouyerismo, exhibicionismo y otras perversiones tiernas en la primera parte del libro, y emotivas ternuras perversas, como contrapartida, en la segunda...
Versos para ser recitados, juegos para ser seducidos, puertas abiertas a la ensoñación... estas Perversiones y ternuras son, en última instancia, un catálogo de fantasías hechas poema y un sorprendente modelo de versatilidad estilística, que bebe de fuentes muy diversas (clásicas y pop-ulares) y que termina, por empatía, magnetizando invitablemente al lector.
Un poemario, en suma, brillante y fresco, desinhibido y lleno de guiños y claves, que confirma la personalísma voz poética de Déborah Vukušić, abeja con orejas de lobo.
.
Nota escrita por Vicente Muñoz Álvarez en nuestro blog hermano http://hankover.blogspot.com/

Cita el sábado


El próximo sábado, 21 de noviembre, a las 21:30 horas en el Club Cultural de Amigos de la Naturaleza (C.C.A.N.) de León, la editorial Ya lo dijo Casimiro Parker presentará los poemarios Tic tac, toc toc, de Isabel García Mellado y No hay camino al paraíso, de Javier Das y José Ángel Barrueco, publicados en el 2009.
Acompañando a los autores estará su editor, Marcus Versus, y los poetas Leo del Mar, David González y Vicente Muñoz Álvarez.
¡ Os esperamos !

La poeta griega Kiki Dimoula, Premio europeo de literatura 2010

La poetisa griega Kiki Dimoula ha sido galardonada con el Premio Europeo de Literatura 2010, según anunció hoy en Estrasburgo la Asociación Capital Europea de Literaturas (ACEL) y el jurado que otorgó la distinción.

Dimoula (Atenas, 1931) es, según el jurado, "una de las más fuertes y representativas" escritoras de la Grecia actual, "muy popular" en su país, que ha visto traducidos sus 12 poemarios a ocho lenguas, entre ellas el español.

Miembro de la Academia de Atenas y empleada durante 25 años del Banco de Grecia, Dimoula también ha publicado en prosa, así como numerosos artículos en revistas literarias.
El Premio Europeo de Literatura, que cuenta con el apoyo del Ministerio francés de Asuntos Exteriores, distingue la obra completa de un escritor europeo de talla internacional, que represente la dimensión cultural europea y la promoción del mejor conocimiento mutuo de los pueblos europeos a través de la literatura.

El premio, que será entregado durante los Encuentros Literarios de Estrasburgo, que se celebrarán el 12 y 13 de marzo del próximo año, consistirá en la traducción al francés de dos obras de Dimoula.

El encargado de realizarla será el traductor francés Michel Volkovitch, cuya labor de traducción de obras de la literatura griega moderna también ha sido reconocida.

El primer galardonado en 2006 con el Premio Europeo de Literatura fue Antonio Gamoneda, que ganó meses después el Premio Cervantes y el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana.
ACEL también ha hizo público hoy el Premio de Literatura Francófona Jean Arp, concedido al poeta francés Pierre Dhainaut (Lille, 1935). Este año se cumple el cuadragésimo aniversario de la aparición de su primer libro, "El poema comienza".

El tercer galardón que concede anualmente ACEL es el de Patrimonio Nathan Katz, que distingue el patrimonio literario alsaciano, desde la Edad Media a nuestros días.
El premiado ha sido Rene Schickele, escritor franco-alemán que falleció en 1940, después de que el régimen nazi quemara sus obras y prohibiera la edición de las mismas.

La labor de las traductoras de Schickele, Irène Kuhn y Maryse Staiber, ha sido también reconocida, por su promoción del patrocinio literario alsaciano.

Los premios de ACEL cuentan con el apoyo del Consejo de Europa, el Ayuntamiento, la Comunidad Urbana y la Universidad de Estrasburgo, así como del Consejo Regional de Alsacia.

Texto extraído de aquí

María de la O Lejárraga

María de la O Lejárraga (San Millán de la Cogolla, La Rioja, 1874 – Buenos Aires, 1974) adoptó y conservó durante toda su vida los apellidos del marido, Gregorio Martínez Sierra. Además de los apellidos, guardó siempre en su corazón cierta dependencia “moral” del él. La mayoría de sus obras, como han señalado muchos estudiosos de la autora, llevan el nombre del esposo y en algunas aparecen los dos. María sólo firmó unas traducciones, los volúmenes de prosa “Cuentos breves” (1899), “La mujer ante la República” (1931), “Una mujer por caminos de España” (1952), “Viaje de una gota de agua” (1954), “Gregorio y yo (medio siglo de colaboración)” (1953), y la colección de obras teatrales “Fiesta en el Olimpo” (1960).

María Lejárraga vivió una vida intensa. Nació en San Millán de la Cogolla el 28 de diciembre de 1874, en una familia culta. Estudió en la Escuela Normal y luego empezó a trabajar como maestra en un barrio obrero de Madrid, en el que conoció la pobreza a través de los cuentos de sus alumnos. En 1897 se enamoró de Gregorio, un amigo de sus hermanos a quien conocía desde hacía años, y que compartía con ella el interés por la literatura y sobre todo por el teatro. Ya antes de casarse, los dos emprendieron una relación que dio como resultado la publicación de obras compuestas en común: “El poema del trabajo” (1898), “Diálogos fantásticos” (1899), “Cuentos breves” (1899), “Flores de escarcha” (1900) y “Almas ausentes” (1900). Tras la boda, en noviembre de 1900, María y Gregorio vivieron años felices, escribiendo prosa y teatro, y frecuentando los ambientes literarios y artísticos europeos. En 1905 María pidió una beca para estudiar psicología en París, porque su marido padecía de tuberculosis y los médicos le habían aconsejado que buscase un clima más cálido que el de Madrid. A la estancia francesa siguió una temporada de viajes por Europa, antes de que la pareja volviera a España para ocuparse de la carrera teatral. En 1907 Gregorio conoció a Catalina Bercena, una actriz cubana con la que formó su compañía teatral en 1915 y que logró conquistarlo.

El escritor mantuvo la apariencia de un matrimonio normal hasta 1922, año en que nació su hija con la actriz; Lejárraga parecía aceptar la situación, a pesar de su sufrimiento. María fue víctima de la traición y del abandono de un marido siete años más joven que ella, pero siguió escribiendo comedias y ensayos que él firmaba y representaba con su nombre. Lejárraga empezó a dedicarse al movimiento feminista y participó en las asociaciones femeninas que promocionaban la educación de la mujer. En 1925 la compañía teatral de Martínez Sierra emprendió una gira por Europa y América. María dependía del dinero que Gregorio le enviaba de manera irregular a cambio de sus comedias. Durante la ausencia del marido, la escritora se dedicó al activismo feminista: participó en el Lyceum Club entre 1926 y 1936, y fundó la Asociación Femenina de Educación Cívica en 1931. El mismo año se acercó a las ideas progresistas y entró a militar en las filas del Partido Socialista Obrero Español, lo que luego la llevó a ser víctima de la represión del franquismo y del nazismo, que la obligaron al exilio. Al estallar la Guerra Civil, María fue enviada a Suiza, pero al caer la República tuvo que irse. Se fue a Niza, donde tenía una casita para pasar el invierno. Gregorio, tras una breve estancia en España, se había ido a Buenos Aires y enviaba dinero de modo irregular, hasta que murió de cáncer abdominal en 1947.
La muerte del marido coincidió con una temporada de silencio de la escritora, debida a las cataratas que no le permitían ver. En 1948 María emprendió otra vez su labor creativa, y tuvo que empezar a usar su nombre y establecer su autoría de las obras anteriores, para cobrar los derechos de autor. Además de la pérdida de Gregorio, tuvo que enfrentarse a la derrota de la España republicana, que era para ella el final de un ambicioso proyecto, la desaparición de una comunidad política con la que se había ilusionado y la pérdida del hogar al que no podía volver. Por supuesto, su visión del mundo se había vuelto más amarga, y las obras de la segunda mitad del siglo reflejan su espíritu herido.En 1950, María vendió la casa de Niza para irse a Nueva York y luego a Hollywood, donde fracasaron los intentos de que aceptaran sus cuentos y comedias. Se fue entonces a Méjico, y al final a Buenos Aires, donde vivió los últimos veinticuatro años de su vida, escribiendo libros, traduciendo comedias, y trabajando para periódicos, revistas y emisoras de radio. La producción literaria de los años en Buenos Aires incluye “Fiesta en el Olimpo y otras diversiones menos olímpicas”, el único volumen de teatro firmado por María y redactado libremente, sin la influencia del marido. La escritora murió en esa misma ciudad, el 28 de junio de 1974.


Texto extraído de aquí

Zenobia Camprubí


Zenobia Camprubí Aymar, nacida en la localidad catalana de Malgrat de Mar en 1887, contrajo matrimonio con Juan Ramón Jiménez en 1916, convirtiéndose desde ese momento y hasta su fallecimiento, 40 años más tarde, en compañera inseparable y decisiva colaboradora del poeta en todos sus proyectos literarios.

Única hija de una familia culta y adinerada, su madre portorriqueña y su padre catalán se casaron en Puerto Rico, país al que ella estaría unida toda su vida. Después de la boda, la pareja se instala en Barcelona. Allí nace Zenobia.

A los nueve años, viaja a Estados Unidos con su madre, lugar en el que residirá hasta 1909. Por eso, cuando regresa a España, la llaman «la americanita». Allí había comenzado sus estudios universitarios en Columbia, asistido a actividades culturales y clubes de mujeres. Había entrado en contacto con el feminismo americano, había viajado sola, había leído a los clásicos españoles e ingleses y había seguido un curso sobre literatura.

Desde su adolescencia, empezó a escribir cuentos en castellano y en inglés, y a desarrollar sus dotes literarias. Pronto se interesa por la obra del poeta y pensador indio Rabindranath Tagore, a quien traduce al inglés.

Entre 1909 y 1910 estuvo en La Rábida. Allí improvisó una escuela para enseñar a los niños de la aldea, escribió artículos que envió a diversas revistas norteamericanas y, sobre todo, se aficionó a la poesía popular española.

Desde 1910 Zenobia vivió en Madrid. Allí se relacionó fundamentalmente con norteamericanos, ya que le angustiaba no poder moverse sola con libertad, hasta que conoció a Susan Huntington, que dirigía el Instituto Internacional de señoritas, donde se alojaban extranjeros que asistían a los cursos de verano que se organizaban.

Asistió a numerosas conferencias, pero sólo podía hacerlo acompañada de un matrimonio norteamericano, los Byne. Este matrimonio organizaba fiestas y en ellas escuchó hablar de un arisco y extraño poeta huésped de la residencia que se quejaba del ruido, pero que pegaba el oído a la pared cuando oía la risa de Zenobia, a la que entonces no conocía. Zenobia conoció a Juan Ramón Jiménez en 1913, en una de esas conferencias celebradas en la Residencia donde él trabajaba.

En 1916 se casa con el poeta (diez años mayor que ella) en Nueva York. A partir de este momento, la vida de Zenobia se centró en dos aspectos: llevar adelante actividades socialmente comprometidas (en 1919, por ejemplo, funda en Barcelona la asociación "La Enfermera a Domicilio”, una especie de servicio social clínico sin fines lucrativos) y apoyar a su esposo (será su traductora, correctora de estilo, secretaria, agente…). Su ambición no residía en la literatura, sino en alcanzar un ideal e hizo de Juan Ramón Jiménez una razón de su vida.

Se puso al frente de pequeños negocios que compensaran los problemas económicos del matrimonio, templó el ánimo de su marido, alentó su pluma… y sorteó problemas tan importantes como abandonar España dignamente tras el estallido de la Guerra Civil. En agosto de 1936 el matrimonio inicia un periplo en el que recorrerán Cuba, Estados Unidos, Buenos Aires y Puerto Rico, donde Zenobia trabajó como profesora en la Universidad de Río Piedras. En 1951 se somete a una operación de cáncer en Boston. En 1954 se instalan en Puerto Rico, porque Juan Ramón no soporta los EE. UU. Zenobia no sólo deja atrás una vida intelectualmente interesante, sino también la posibilidad de someterse a un buen tratamiento en caso de que reaparezca la enfermedad, cosa que ocurre.

Zenobia Camprubí está considerada como una de las primeras grandes feministas de España, miembro destacado del Lyceum Club Femenino junto a Victoria Kent, desde el que reivindicó constantemente una mayor presencia de la mujer en todos los ámbitos de la sociedad. Entre sus muchas iniciativas de carácter humanitario, destacaron varias campañas a favor de los niños españoles víctimas de la Guerra Civil, realizadas desde su residencia en Nueva York.

De su actividad en el mundo de las letras, sobresalen las primeras traducciones al castellano de la obra de Rabrindranat Tagore y su constante difusión de la cultura y la lengua españolas, especialmente en los ambientes literarios de Estados Unidos, desde su puesto de profesora en la Universidad de Maryland.

Zenobia morirá el 28 de octubre de 1956, dos días después de que su esposo recibiera el Premio Nobel de Literatura.

Al recibirse en Moguer la noticia de muerte de Zenobia, el mismo día 28 de octubre, que era domingo, la corporación municipal celebró una sesión extraordinaria en la que se acordó en primer lugar nombrar Hija Adoptiva de Moguer a Zenobia Camprubí, solicitándose además al Ministerio de la Gobernación la autorización correspondiente para el nombre de Zenobia Camprubí a la calle de las Flores.

El entonces alcalde de Moguer, Juan de Gorostidi, cursó al poeta en la mañana del lunes 29 un telegrama con el texto "todo Moguer comparte tu dolor por el fallecimiento de Zenobia" y, ya por la tarde, la corporación volvió a reunirse acordándose, por un lado, la celebración de un solemne funeral que tendría lugar el 5 de noviembre y, por otro, suspender todos los festejos organizados en señal de júbilo por la concesión del Nobel a Juan Ramón.



Texto extraído de aquí

Doris Lessing


Doris Lessing se niega. Ya no quiere hablar más del Premio Nobel de Literatura. Llama "esa cosa" al galardón más importante de la literatura que obtuvo hace dos años. "Desde que lo gané no he hecho otra cosa que hablar, pero mi oficio es escribir", señala Lessing.

La autora británica nunca le dio mucha importancia a los premios y homenajes. No le gustan las fiestas, ni siquiera la de su 90 cumpleaños el 22 de octubre. La gran señora de la literatura inglesa no disfruta del jaleo relacionado con su cumpleaños o el Premio Nobel. También le afecta la edad. Cuenta que tras sufrir un ataque de apoplejía le cuesta concentrarse. Vive en el norte de Londres con su hijo, del cual debe ocuparse, dice.

Ya no puede escribir. "Ya no tengo energía para eso, ya no puedo hacer las cosas que quiero", afirma. También por eso, su libro 'Alfred y Emily', una historia sobre sus padres, será el último. En realidad hay pocas personas que tengan tanto para contar. La larga sombra de dos guerras mundiales, una infancia infeliz, matrimonios fracasados... la multifacética obra de Lessing está influida por sus propias experiencias.

Una vida marcada por una dura infancia

Está marcada especialmente por su niñez en África, la vida de los señores coloniales británicos y el racismo. Su primer libro 'Canta la hierba' (1949) es también un drama sobre el amor entre blancos y negros y leyes raciales infranqueables. Debido a sus críticas contra el 'apartheid' y el régimen, Lessing no pudo viajar durante décadas a Zimbabue y Sudáfrica.

Envió 'Los diarios de Jane Sommers' bajo un seudónimo a varias editoriales, que rechazaron el texto.

La escritora británica considera que es su deber provocar y denunciar las injusticias, frecuentemente de manera divertida. Criticó al mundo literario, obsesionado con la fama, al enviar la ya famosa obra 'Los diarios de Jane Sommers' bajo un seudónimo a varias editoriales, que rechazaron el texto.

Lessing era rebelde ya de niña, pero también profundamente infeliz. Nació En 1919 como hija de un oficial colonial en Irán, luego la familia se mudó a Rhodesia del Sur, hoy Zimbabue. Su padre, un militar condecorado, administró allí sin éxito una plantación de maíz. El padre estaba amargado y la madre frustrada por no poder vivir la fina vida inglesa en África "entre los salvajes". "Odiaba a mi madre", dijo Lessing en una ocasión. Halló consuelo en la literatura, que devoraba con ahínco.

A los 19 años, Lessing se casó con el oficial colonial Charles Wisdom, con el cual tuvo dos hijos. Pero el matrimonio fracasó y Lessing abandonó a Wisdom y los niños, un tema del cual no le gusta hablar. Frente a la pregunta de si se arrepiente de un matrimonio tan temprano, responde: "La gente parece olvidar que en aquella época había guerra".

Lessing también buscó refugio en el movimiento comunista. Allí conoció al comunista exiliado alemán Gottfried Lessing, con el cual se casó en 1944 y que le dio un hijo. Pero también el segundo matrimonio fracasó, y en 1949 Lessing se marchó junto a su hijo menor Peter a Londres y se dedicó allí a su carrera de escritora. Tras la invasión soviética de Hungría se apartó de los comunistas y los calificó de mojigatos.

Obtuvo el Premio Nobel en 2007, aunque la Academia no la soportaba

El tema del comunismo también se encuentra en su principal obra, 'El cuaderno dorado' (1962). El libro logró fama mundial como la 'biblia para feministas'. Sin embargo, Lessing nunca se unió al movimiento y siempre lo criticó.

En su obra 'La grieta' explora las relaciones entre hombres y mujeres. Allí Lessing habla de un mundo sin hombres, donde mujeres gordas flojean tomando sol. Los problemas empiezan cuando nace el primer varón. ¿Cree que sería mejor un mundo sin hombres? "Dios mío, no, que pensamiento horrible", exclama.

Tras publicar 'La grieta', Lessing obtuvo, después de varias décadas en la 'lista de espera', el Premio Nobel de Literatura. Sin embargo, fue más bien un triunfo sobre quienes aseguraban que nunca obtendría el galardón, porque la Academia no la soportaba.

Es inolvidable el momento de aquel día que Lessing sale despeinada y con bolsas de supermercado del taxi y los periodistas le informan sobre el Nobel. En ese momento Lessing calificó el premio como "Royal Flash", la carta más alta del póquer. Sin embargo, no le agradó nada la histeria. Poco después calificó el galardón con su acostumbrada ironía de "maldito desastre".


Un poema de Noemí Trujillo de su nuevo libro "Lejos de Valparaíso"


Estoy en llamas.
En mi corazón
no hay lares.
La noche ondula
sobre mi raíz
y no podré dormir.
Mañana te marchas
de viaje.
Otra vez.
Tengo una falta
de diez días.
Si pudiese,
te lo diría.
Estoy en llamas.
Mis ovarios huelena fruta podrida.


Extraído del libro "Lejos de Valparaíso" de Noemí Trujillo, Ed. Sial 2009 del que se hará una presentación hoy jueves día 12 de noviembre a las 18:30 en la Casa del Libro del C.C. Vilamarina (Avda. Siglo XXI, 6 - Local 9) Viladecans

Sábado, mientras baño a mis hijas y Jasmín de Yolanda Sáenz de Tejada


sábado, mientras baño a mis hijas…

Isabel tiene 12 años. En su cuerpo (abrigado por mis besos) se adivina el mar de hormonas que la inundan, irrumpiendo en su cerebro con la necesidad animal de sentirse mayor.
Dentro de su piel, su corazón fluye tan vertiginosamente que casi puedo acariciarlo con mis manos.
La comparo contigo y con tus amigas, niña desconocida, con esa miseria de vida que os compra y os vende como perras en edad de parir, cuando sólo sois niñas sin infancia en edad de jugar…

………….

Jasmin

era la mejor,
de lo peor.
Sus amigas
la llamaban
Labios de Oro y
con sólo 14 años
(una noche)
se acostó
con 12 soldados
italianos.
—Seguro que
no durmió—.
Son las once de
la noche en
Sarajevo,
en la base militar
de la OTAN.
(La que los
defiende).
La niña,
que no lleva
minifalda
para no quedarse
atrapada
entre las alambradas,
pasa escondida
en un asqueroso
abrazo de
la noche.
Dentro,
apoyado en un
contenedor,
la espera un soldado.
—Esta vez
es francés—.
Pagará 50 marcos
alemanes
por una felación.
Pero ella se
llevará 10.
Seguro que el soldado
tiene madre,
o hermana,
o hija,
que es peor…
Y seguro que no sabe
(el mal nacido)
que Jasmin,
esa noche,
al volver a
su casa,
desapareció.

Titulares, un poema de Nares Montero



Podría darte titulares para empapelar la habitación.

Hay una serpiente que repta el bajo vientre de los deseos.

Quiero jugar con el sur
como si fuera una palabra que desdibuja las olas
que sólo están allí. En los párpados viscosos.
En el calor más profundo, el de vainilla.
Cuando pienso en ello,
en eso que tú y yo sabemos,
siempre me imagino una niña dando vueltas
haciendo que la falda del vestido
alcance el cielo raso de su cintura
aún por formar.
Ríe y se marea,
como cuando me tocas.
A veces no sucede más que un escalofrío.
Otras, tengo la tendencia suicida
a lanzarme en tus brazos,
en el hueco, esa canasta.
Aterrizar en un aeropuerto fantasma
es uno de mis pasatiempos favoritos.
La hora de la comida se queda en los pulmones.
Llueve a cántaros (¡carámbanos!) en los pies.

Te escribo como si sonaras.
Como si tu refugio fuera mi caja de resonancia.
Un mundo perpendicular en el que los sucesos
fueran, se fueran,
inservibles.
Todas las cuerdas te rozan y tu apareces,
tan de repente, como un susto de cine.
Sesión golfa.
Cubierto de gotas, húmedo.
Recién nacido en un invernadero.
Te rodean tomates y acelgas
y menguado pero maduro abres los ojos pulpa,
las verdes vainas que me piden
un susurro de alimento,
sexo postrero y maternal.
Inicio de vida y un mundo limpio
que es una esperanza maltrecha.

Podría darte titulares y te doy la esquela de tu muerte,
porque no existes.


Barrio Sésamo

Las 23 Pandoras os desean feliz aniversario


Beirut, I love you de Zena El Khalil


Beirut me disparó al corazón una y otra vez. Siempre era una sorpresa. Siempre era un final y un nuevo comienzo. La mañana después de una botella de vodka. Un renacimiento. Beber agua después de comer helado. Los escalofríos que produce una canción maravillosa. El ataque de pánico después de fumar hachís. Los fantasmas en los túneles. Los miles de personas, diecisiete mil para ser exactos, que siguen oficialmente desaparecidas. Son las fosas comunes aún sin descubrir. Son las ejecuciones que vendrán a continuación. Es una operación de reconstrucción del himen. Es la adicción a la siguiente bomba. Es el pintalabios naranja. Es resguardarse bajo los emparrados. Es estar montando en bicicleta cuando deberías estar eligiendo un marido. Es
ponerse un vestido de novia y correr por las calles de Beirut. Es descubrir la religión a través del sexo. Es descubrir la música a través de la guerra. Es comer queso en lonchas con pan de pita. Es beber whisky con tres hielos, ni uno más ni uno menos.
Es llorar mientras duermes.
Es vomitar moscas negras.
Es matar mientras tienes un orgasmo.
Fragmento de Beirut, I love you de Zena El Khalil. Ediciones Siruela, 2009.

La violencia machista en la literatura


La profesora de Literatura de la Universidad de Córdoba María José Porro analizará la presencia de la violencia machista en la historia de la literatura universal en el marco de las IV Jornadas Internacionales Análisis Feministas de la Literatura que tendrá lugar en Córdoba del 11 el 13 de noviembre.
Porro ha explicado a Efe que analizará tres variantes como la existente en función del sexo masculino o femenino, la amparada por la legislación al reconocer una sociedad patriarcal con derechos y deberes a hombres y mujeres distintos, y la institucional, en la que es la sociedad la que genera unos determinados comportamientos que tienen como sujeto paciente a la mujer.
La profesora ha destacado la violencia existente en el Poema del Mio Cid, en la que "porque hay una aplicación de la ley en la sociedad patriarcal", los infantes se vengan de las hijas del Cid, simplemente porque consideran que "éstas lo ofenden".
También, Porro ha indicado que esta discriminación de género aparece en "todo el teatro español del Siglo de Oro, en cuyas obras la mujer hace cosas que no debe hacer".
En cuanto a la violencia institucional, Porro ha explicado que se "percibe mejor en poesía", ya que hay multitud de autores y poemas que denuncian la violación como motín de guerra, como si "éste hecho estuviese implícito en los conflictos bélicos".
La ponencia de Porro se celebrará el próximo 12 de noviembre y, aunque se centrará en el análisis de textos literarios, la experta no ha querido dejar pasar el "trato exhibicionista que desde los medios de comunicación otorgan a la violencia machista".

Fuente: Agencia EFE

La poeta Alda Merini candidata al Nobel



"Soy una pequeña abeja furibunda. Me gusta cambiar de color. Me gusta cambiar de medida".
La poetisa Alda Merini eligió estas palabras para abrir su página web.

Nacida en Milán, en 1931, de familia modesta, la poetisa murió en esa misma ciudad el pasado domingo, 1 de noviembre, a causa de un tumor óseo. Fumaba 70 u 80 cigarrillos al día, pero a sus 78 años sostenía que el tabaco le había alargado la vida. Siempre llevaba un collar de perlas, pero vivía y murió en la indigencia por elección personal.

Su Movimiento Pioneros hace que el niño maneje sus propios problemas.
Se la considera una de las voces más claras y profundas de la poesía italiana del siglo XX. Quienes la conocieron han escrito estos días que era simpática y nostálgica, y que su personaje vital recordaba al eco de sus versos, de apariencia simple y burguesa, pero a la vez transgresores, intensos y dolorosos.

Con lucidez extrema, Merini narró en sus poemas la experiencia de la locura (vivió casi 20 años en manicomios, de 1961 a 1978) y de la estrechez física y económica. "Me inquieto mucho cuando me atan al espacio", escribió.

En una entrevista reciente, contaba que se volvió loca de dolor:
"Murieron mis padres a la vez, cuando yo era muy joven. Y luego me separaron de mis hijas, no me dejaron estar con ellas. Fueron criadas por tres familias. No sé cómo encontré el tiempo para tenerlas. Se llaman Emanuela, Barbara, Flavia y Simonetta. Siempre les digo que no digan que son hijas de la poetisa Alda Merini. Esa loca. Ellas responden que soy su madre y basta, que no se avergüenzan de mí. Me conmueven".

Se casó con Ettore Carniti, un hombre celoso y muy infiel. Una noche que volvió a casa oliendo a perfume de otra mujer, ella cogió una silla y se la rompió en la cabeza. Él sobrevivió al golpe y llamó a la ambulancia. A ella la llevaron al Paolo Pini, el viejo manicomio de Milán.
El lugar era "terror, odio, sombra y muerte, el infierno de Dante, pero hice amigos allí", contaba. "Ése fue mi Premio Nobel". Le dieron 37 electrochoques. "Salir viva fue un milagro, allí se entraba para morir".

En 1953 publicó su primer libro, Presencia de Orfeo. Empezó a escribir siendo una niña, y uno de sus primeros poemas se lo dedicó al legendario banquero Enrico Cuccia. "Una vez me lo crucé por la calle y le dije: 'Yo tengo hambre'. Él contestó: 'Buena señal'. Y tiró derecho".
"La poesía nace de un terreno de dulzura, de amor. Las verdades me vienen de los sueños, los muertos me visitan", contaba.

Escribió también prosa y aforismos, y en 1996 fue propuesta para el Premio Nobel de Literatura por la Academia francesa. Su gran obra, La Terra Santa, le valió en 1993 el Premio Eugenio Montale. Se declaraba loca de amor por Rilke, y le gustaban Hölderlin, Valéry, Melville, Gide, Pirandello, Dante, Manzoni. Y en la vida: "Quasimodo, Manganelli, Montale, Raboni, la Spaziani. A algunos los amé y los tuve".

Otros de sus libros son Testamento, Vuoto d'amore, Ballate non pagate, Superba è la notte, L'anima innamorata, Corpo d'amore, La carne degli Angeli, Più bella della poesia è stata la mia vita o Clinica dell'abbandono.

Era una persona religiosa y muy pagana. "Me he portado siempre como una gran pecadora y no me he arrepentido de nada", dijo al diario La Repubblica en 2006. "No voy a la Iglesia a murmurar, pero Dios está aquí conmigo. Olfateo su olor. Dos cosas me convencen de la existencia de Dios: que no soy dueña de mi voluntad y que el océano Pacífico no pueden haberlo creado los científicos".

En sus últimos años, puso letra a canciones de artistas como Milva, Lucio Dalla, Roberto Vecchioni o Giovanni Nuti. Y dejó estos versos:
Navego como una sombra
en el sueño del día
y sin saber
me reconozco como tantos
inclinada sobre un altar
para ser comida quién sabe por quién.


Mujer, Literatura e Historia en Zaragoza

El Taller de Historia de la UZ organiza el II seminario "Mujer, Literatura e Historia". El encuentro se celebrará hoy y mañana en el salón de actos del Instituto de Ciencias de la Educación, en el Campus San Francisco.


Hoy comienza el II Seminario "Mujer, Literatura e Historia"
El Taller de Historia de la Universidad de Zaragoza, en colaboración con el Instituto Aragonés de la Mujer, organiza hoy y mañana el segundo seminario "Mujer, Literatura e Historia". El encuentro se celebrará en el salón de actos del Instituto de Ciencias de la Educación (Campus San Francisco), con entrada libre.

La sesión de hoy se centrará en la novela histórica, con las conferencias "Donde ellas cuentan: voces femeninas en la novela histórica", de Carlos García Gual, catedrático de la Universidad Complutense de Madrid (18.15 horas) y de la escritora Toti Martínez de Lezea hablará sobre "Mujeres que escriben novelas de historia" a las 19.30 horas.

El viernes, el escritor y catedrático de Historia José Calvo Poyato hablará, a las 12.00 horas, sobre "Hipatia de Alejandría: de la historia a la novela". Finalmente, el poeta Manuel Martínez Forega clausurará el seminario a las 18.00 horas, con la conferencia "La mujer en la historia de la poesía".

Sofía Castañón en Pieces

ARDE OVIEDO



Entra y sopla.